Dentro de las finalidades recreativas está el salto, donde los caballos entrenados tienen que saltar una serie de obstáculos en un orden determinado;
También tenemos la doma clásica o adiestramiento, que consiste en una especie de paseo que hacen caballo y jinete sin previo conocimiento de la ruta, lo que hace que el caballo tenga que estar muy atento a las órdenes de quien lo monta. Ésta disciplina concrétamente es la que nos permitirá disfrutar de la naturaleza al deber practicarla en zonas de campo.
Y tenemos además el campo traviesa o cross-country, que es una carreta donde se prueban habilidad, velocidad y resistencia.
Entre los equipos necesarios para practicar la equitación encontramos la montura o silla, fabricada en cuero y otros materiales naturales o sintéticos donde se sienta el jinete; las hay de diversos tipos, dependiendo de la clase de equitación que queramos practicar. Ésta se extiende por los costados del animal mediante faldones, y por debajo del animal se pasan cinchas que se abrochan por la parte baja de los faldones manteniendo la silla en su lugar.
El ronzal es un sistema de correas que pasan por la cabeza del caballo con un anillo bajo la barbilla para conectar allí una correa de guía y así controlar al caballo desde el suelo.
La brida es en realidad un conjunto de implementos: el bocado consiste en una barra metálica que va en la boca del animal; el collar, conectado al bocado, es un sistema de correas de cuero que pasan por la cabeza, nariz y quijada del caballo; y las riendas, también correas de cuero, se sujetan también al bocado por ambos costados llegando al jinete para que éste con sus manos pueda controlar al caballo.
La equitación puede practicarse a cualquier edad, incluídos los niños, siempre que no sufras de malformaciones de columna, lumbalgia o problemas de corazón.
Se podría decir que la equitación es el deporte más completo que existe junto a la natación, de la que ya os he hablado en otra entrada anterior. Nos ayuda a tonificar músculos como los abdominales, glúteos, piernas o espalda. Además, mejora el equilibrio, la postura corporal y la movilidad. También nos ayuda a evitar posibles lesiones en un futuro.
Muy importante es por otro lado el ejercicio cardiovascular, que puede llegar a exigir los mismos niveles de esfuerzo que correr o el ciclismo. Aunque en un paseo el desgaste es más bajo, en un recorrido con obstáculos se pueden quemar fácilmente 600 calorías por hora.
Y por supuesto, también aporta beneficios psicológicos: al montar a caballo, debemos mantener la concentración, por lo que nos ayuda a desconectar de los problemas del día a día y a quitarnos el estrés. Es un deporte que se suele hacer al aire libre y con el que podemos disfrutar de la naturaleza cuando hace buen tiempo.
Así que si quieres probar este apasionante deporte natural, en España existen numerosas empresas que organizan rutas por el campo. Podrás acudir con tu familia o amigos y lo pasaréis genial. Infórmate de la previsión del tiempo de tu ciudad y lánzate a conocer uno de los deportes más completos.
